martes, 22 de enero de 2008

El DIA


El último día, el día en que te vea por última vez
compraré mil rosas para adornar tu recuerdo,
caminaré hasta tu casa y pasaré por las calles
que me vieron pasar con sonrisas y que me vieron
la ilusión en los ojos, los ojos que te extrañan como a nadie.

El último día en que te vea, ese día fatal de mi destino,
iré a la vieja iglesia donde le pedí a dios tu amor y
me incaré en primera fila para llorar el fin
y pedir que tus sueños sean felices y pedir que las aves
te acompañen hasta el campo de la gloria.

Ese día sin noche moribunda, esas horas sin minutos
regresaré a verte, y buscaré tus ojos como mares
y miraré en tu alma mi camino y tomaré tus manos con las mías
y dire te quiero, aquí estoy, no te vayas, y me quedaré en
el silencio sepulcral.

Ese último día en que te vea, te abrazaré con fuerza y locura,
y me quedaré en tus brazos para siempre,
y dejaré mi corazón en el tuyo y mi alma en tu alma,
y cuando al fin la fuerza del destino nos separe
daré media vuelta y caminaré directo al sol.

miércoles, 16 de enero de 2008

UN...


Un perro herido sin su dueño,
un ave sin un árbol,
una montaña sin nieve,
así me siento si no estás.

Una iglesia sin capilla,
una flor sin su color,
una silla sin respaldo,
así me siento si no estás.

Un lipstick sin tus labios,
una flecha sin su blanco
una mina sin oro,
así me siento si no estás

Una vela sin su llama,
una noche sin estrellas,
una copa sin su vino,
así me siento si no estás.

martes, 1 de enero de 2008

HAPPY NEW YEAR


Son las 11:59 de la noche del 31 de diciembre,
me pregunto dónde estarás, con quiénes.
Yo para variar pienso en ti, pero esta vez estoy lejos,
tratando de huir de tu recuerdo, de lo que fuimos.

A un minuto de comenzar el año, irremediablemente
pienso en ti.
¿Tú harás lo mismo? ¿pensarás en mí por un instante?
Veo el reloj en su inexorable marcha atrás y pienso en
que no habría nada mejor que estar contigo.

Ha llegado la hora, es año nuevo, pensé que ya no
pensaría en ti, pero eso no sucede.
Comienzan a abrazarme y a desearme mejor suerte,
yo sólo pienso en cómo hacer para no llorar.

En este preciso momento no quisiera estar en otro
lado que no fuera contigo.
Veo mi celular, varios mensajes de personas que
me quieren, no hay ninguno tuyo, y pienso:
ella nunca me escribiría ni llamaría, no es su estilo.
Mientras yo daría la vida por estar junto a ti.