ETERNA BÚSQUEDA

De regreso de tomar un café en el centro comencé a observar a las personas que venían a mi alrederor, y me he dado cuenta que en general nos encontramos en un estado de desilusión muy profundo. Los rostros de la mayoría son sombríos y tristes e incluso los que sonríen lo hacen desde una especie de alegría agria que no llega a ser completa. Nos hemos convertido en una especie de entes sin destino definido, autómatas que viven sin saber qué es realmente lo que se buscan en esta vida.

Y es que en realidad todos buscamos algo, la señora que acaba de pegarle a un niño sentado en el asiento, el hombre que va parado cerca de una de las puertas y que manda mensajes por celular, la pareja que se habla pero no se mira, seguron discuten por algo, sus rostros son duros. Todos buscan algo, pero qué.

Me asomo por la ventana del vagón y la calle me parece más sombría que antes, aunque la luz de los autos sean inumerables. Veo los rostros de las personas que van en los autos, me pregunto por qué a todos se nos ve cara de cansados, por qué no sonreímos. Observo a las prostitutas que están sobre la calzada, me parece que han ido en aumento en los últimos meses. Aunque la mayoría son hombres vestidos de mujer, las pocas mujeres me parecen que son improvisadas, algo las ha llamado a venderse, y pienso que pueden ser nuestras madres, nuestras novias o nuestras hermanas. Ellas también buscan algo.

Me quedo pensando en lo qué busco yo, quizás nunca lo sepa, quizás ya lo encontré y no me he dado cuenta y lo he perdido, quizás ni siquiera estoy cerca de encontrarlo, quizás como parte de un plan maestro nunca lo sepamos con certeza, o quizás solo falte un pequeño esfuerzo para quitarnos las ataduras de nuestra propia ignorancia. Espero algún día todos encuentren lo que buscan, quizás ese día no esté lejano.

¿QUÉ IMPORTA?

Qué importa que estés a diez años luz,
que camines por lugares donde no se usen los pies
y que la voz sea sólo un pensamiento,
si con la imaginación puedo tocarte.

Qué importa que tu imagen sólo sea una nube en el cielo
y que tus ojos no me miren desde cerca,
si te imagino sonriendo y la lluvia
me recuerda la humedad de tu cabello en las mañanas.

Qué importa que físicamente no estés aquí,
que hayas emigrado como mariposa monarca,
sí cuando tu bates las alas
la mañana despierta más iluminada.

Qué importa que no te sienta junto a mí,
si en las noches en que te sueño
los cometas pasan cerca
y la luna se asoma para hablarme de ti.

Que importa que ni siquiera me recuerdes,
que te hayas ido a vivir a una región lejana,
si cuando abro mi ventana
los pájaron cantan y florece un alhelí.

Que importa si en el futuro no estás nunca más,
y no te mire caminar por los jardines,
si en el pasado fuiste mi diosa
y en el presente muero por ti.

RECIBIR Y DAR

Hoy recibí una gran enseñanza. Se trata de lo que en busdismo se llama "Recibir y dar". Creo que la mayoría de nosotros se imagina que quiere decir esto, pero pocos lo entendemos y lo llevamos a la práctica realmente. Lo importante de este asunto es la intención de comprender y desear que todos los seres sean felices. En primer lugar uno imagina que el sufrimiento de todos los seres sintientes es un humo negro que llevamos hasta el corazón. Ahí ese humo es desintegrado por nuestro deseo de acabar con ese sufrimiento y a la vez también acabamos con nuestro egoísmo. Después nos imaginamos como un ser iluminado que da felicidad a todos.
Lo importante de esta práctica es que es un método muy poderoso no solo para generar la intención de ayudar a los demás, sino también para imaginar que nos podemos ayudar a nosotros mismos en combatir nuestras enfremedades, así como ayudar a nuestros amigos y familiares pensando que todos sus problemas pueden ser resueltos.
En lo personal, cuando acabé de hacer ese ejercicio me sentí realmente feliz, pensando que había hecho algo por ayudar a los demás. Lo mejor de todo es que uno logra comprender el dolor y la confusión en la que vivimos todos, además de recordarnos que nuestra mente es muy poderosa y si deseamos algo con todo el corazón es un hecho que se cumple.

BUENA PARTIDA

Si algo comprobé hoy es que soy muy malo para los juegos de azar, pero siempre gano. Será porque realmente no me importa perder o ganar, simplemente me divierto. Hoy un amigo me invitó a su casa a echar el poker, no tenía muchas ganas pero despues de tanto insistir y sin nada mejor que hacer decidí ir un rato. Lo comprobé una vez más, lo mío no es el juego pero sí la suerte. Después de horas de estar sentado sin que la balanza del destino se moviera un poco hacia un lado, llegó mi mano ganadora.
A veces cuando estoy en alguna reunión siento que me falta algo, me siento incompleto. A veces siento que cuando me subo al coche y volteo hacia el asiento de al lado hace falta alguien que esté ahí y que me diga que le baje a la radio, pero la mayoría de las veces puedo subirle al volumen hasta que no escucho ni la sirena de una ambulancia. No sé, a mi edad no debería ir solo a todas partes, muchos pueden pensar que soy gay.
Pero no importa, la mayoría de mis conocido se ha acostumbrado a verme llegar solo o a lo mucho con mi hermano, mi fiel escudero. A las 2 AM, la suerte ha tocado a mi puerta. La última mano ha sido ganada por el más malo de los jugadores de poker, una buena mano de casi 200 pesos. En el fondo suena una voz que me dice: "afortunado en el juego, desafortunado en el amor", trato de ignorar esa voz y recojo las fichas de la mesa. Es hora de partir. Me despido de mi amigo y de su perra, subo al coche y prendo el estéreo, me voy a mi casa. Miro hacia el asiento de al lado y como de costumbre está vacío. No cabe duda que soy muy afortunado.

UN TRABAJO EXPRESS

Estoy sentado en un sillón del Starbucks que está en Pilares, en la colonia Del Valle. Nunca me han gustado estos sitios porque los considero bastante frívolos, prefiero El Jarocho de Coyoacán con unos churros. De cualquier forma tengo que trabajar y en mi casa no se han reunido las condiciones necesarias para hacerlo sin interrupciones. Así que pedí un venti del día y me senté en este sillón junto a la ventana, lo que me permite ver el movimiento de las mesas de afuera. Grave error si lo que se quiere es escribir y entregar a tiempo. Seguro no lo haré.
Lo bueno que tiene este lugar es que está frente al parque, lo que hace que la vista sea estupenda y las ideas surjan plenas, aunque no para mi tema de redes inalámbricas. Pero ya que estoy aquí decidí observar un rato a las personas que visitan este recinto de café y poses acertivas. Está a punto de llover y la última luz de la tarde pasa a contraluz a través de los árboles, imagen poetica en medio de gente hablando de negocios, divorcios y taréas escolares.
Dos niñas de entre 16 y 17 años están en una mesa de afuera, platican tranquilamente. No cabe duda de que este lugar es ideal para hacer "relaciones públicas". Junto a ellas hay dos jóvenes de casi la misma edad, evidentemente están en la edad del ligue y no tardan en hacer contacto visual con ellas. Las chicas responden con una sonrisa tímida, pero en sus ojos nace una esperanza. Diez minutos despues, uno de ellos con aspecto de galán de antro las aborda, no puedo escuchar lo que dicen pero es evidente que hace el esfuerzo por hacerlas reír y romper el turrón, no lo logra. Regresa a su mesa con el pretexto de ver algo en su computadora. Río burlonamente por dentro y pienso en batazos y homerunes. Sigo tratando de concentrarme pero me distraigo checando cosas en internet o platicando en el messenger. Un rato después para mi sorpresalos dos caballeros se encuentran en la mesa de las chicas platicando y por lo que se ve ya consiguieron que les den sus números telefónicos.
Inmediatamente recuerdo mis días de ligues y lo malo que era para acercarme a alguien en esas circunstancias. Creo que es algo generacional y me da gusto ver que los jóvenes de hoy, a pesar de todo, pueden entablar relaciones personales sin problema a pesar de creerlos metidos en el internet todo el día. Un rato después las chicas se despiden, creo que esta vez los galanes de antro no lo lograron, uno de ellos hace el típico ademán de "te llamo eh", me pregunto si lo hará o si el número que le dieron será el verdadero, río otra vez. Comienza a llover, veo a los perros correr junto con sus dueños para cubrirse del agua, yo recuerdo a uno que quiero mucho, vuelvo a sonreír.

SOBRE EL EXTREMISMO

Leyendo un libro llamado El ABC de la felicidad, de Lou Marinof, donde ABC quiere decir Aristóteles, Buda y Confusio. Un libro que tenía desde hace mucho tiempo, encontré que está basado en la filosofía de esos tres maestros de la antugüedad. Sé que los libros nos llegan el momento indicado, así que en estos recientes días complicados me decidí a quitarle el plastico que lo cubría y tratar de calmar mis nervios con alguna lectura que me dejara algo y quitarme la idea de que sólo me gustan las cosas enajenadas, estúpidas y superfluas. Total, apenas comenzé a leerlo y se me hizo bastante interesante. La idea se centra en el estudio de la civilización occidental, oriente medio, la india y no recuerdo cual otro, y la forma en que la filosofía de eso grandes maestros nos ayudan a resolver uno de los mayores problemas de la humanidad: El extremismo.
No solo el extremismo social que podemos identificar en guerras o en conflictos sociales, sino en nuestras relaciones personales, de pareja, en el trabajo, en fin, en todos los ámbitos del Ser Humano.
El autor señala que a través de su investigación y la plática con algunos de los personajes más calificados en el ámbito religioso y filosófico, encontró que "El camino medio" es la respuesta a todos los conflictos que se nos presentan.
Todo esto me ha dejado pensando que es cierto, el extremismo, en cualquier forma que lo veamos solo nos causan conflictos y no nos permiten entender a los otros, nos separa, nos hace sentir superiores a los demás. En este sentido es igual de malo ser un machista o una ultra feminista, un hooligan o un predicador de la palabra de Dios.
Los dejo con una frase del libro que me gustó bastante y que me ha hecho pensar mucho: "El extremismo destruye la felicidad, la salud y la armonía de usted y de todos sus semejantes".

¿NO ES ESTAR?

Tu me dices que estoy a menos que haya algo mejor.
Yo me pregunto por qué no estás si no tengo nada mejor.
¿Estar es estar a menos que no se haga lo que quieres?
¿O estar es no estar aunque se haga lo que quieres?

Si estamos ¿no es estar de alguna forma?
¿O si estamos es que no estamos en relaidad?
Entonces dime que no estoy
aunque siempre haya estado.

Como no voy a estar si me gusta estar donde estoy.
Si siempre he estado aunque no quieras.
Y siempre has estado aunque no lo sepas.
¿entonces estamos o no estamos?

Ya no voy a estar si no quieres que esté,
pero no me digas que no quiero estar.
Más bien hay que saber estar para estar,
porque estar no es estar por estar.

Ojalá un día esté todo como debe estar
y estemos como queremos estar,
a mí me gusta estar pero no estoy
y a ti que no quieres estar siempre estarás.

LO QUE ME GUSTA

Lo que me gusta de ti es que no eres presa fácil,
llegar a ti exige un poco más que aliento de maratonista y paciencia de Buda.

Lo que me gusta de ti es el grado de tus exigencias
encontrar la respuesta al acertijo en el libro blanco de tu cabecera.

Contigo no hay sexo fácil y eso no se encuentra muy a menudo en estos días.
Llevarte a la cama es un acto supremo de diciplina intelectual y literaria.

Lo que me gusta de ti es el constante recuerdo de ser alguien,
de llevar siempre un jabón para las manos y un verso nuevo para meditarlo.

Lo que me gusta de ti es el alma vieja que llevas a cuestas,
tan pesada para dejarla, tan sabia para no compartirla con la ciencia.

Lo que me gusta de ti se encuentra guardado en los arcanos invisibles de Andrómeda,
lejano como el tiempo e inexplicable como la magia de Grecia.

Lo que me gusta de ti, en resumen, es la parte de mí que se supera, y el deseo de convertirme en el ser supremo que esperas.

Lo que me gusta de ti es lo que vive en mí, lo que sembraste en mí en una tarde otoñal cundo el sol se ocultaba en la pradera.

Gracias a ti por mí, por mi alma renovada, por la lucha de ti, por luchar por ti.
Por hacerme difícil lo que es fácil, por conectarme con la madre tierra.

Una oda para ti que descubriste el diamante enterrado en la caverna y que hiciste de mis días más tristes una suprema prueba,

de confirmar que no hubo nada mejor que le ocurriera a mi ser, que conocerte en aquella noche de luna nueva.

NO SÉ SI SABES

No sé si te has dado cuenta
que la piel se me enchina al verte caminar,
con las pupilas enormes de verte brillar
y que siento que la vida se desborda
por mis centros de amar.

No sé si en esos días en que te rozo
con el tenue filo de mis ansias de amar
has notado que las tardes son más largas,
y que el cielo se conserva para dejarte jugar.

No sé si te has fijado que después de estar contigo
y dejar de verte por un tiempo,
los pies se me hacen tallos gruesos
que no me dejan caminar.

Y que la voz se me envejece como río de antiguas brechas
y la piel que me cubre se convierte en un trapo polvoriento
que me ahoga sin poder descansar.

Entonces dime chiquita, por qué si sabes eso
y conoces los secretos de mi triste suspirar,
me dejas tanto tiempo solo
sin las sabias enseñansas de tus palabras
y con lágrimas que no cesarán hasta verte regresar.

Tarde en Coyoacán

MI VIDA

Caminando solitario entre las calles
de esta ciudad donde nos encontramos,
he sentido tu presencia de cristales
y la electricidad de nuestras manos.

Cuando la luz de la noche entra en mis pupilas
y los seres de luz me hablan de ti,
los minutos sin verte se hacen horas
y tu fragancia lejana viene a mí.

Reducto de tus besos son mis labios,
depositario de tu locura es mi cuerpo,
espacio de tus sueños más bellos
hechizos que jamás se llevará el viento.

Insondables tus lamentos me recuerdan
que has sido para mí un enigma
con tus viejos miedos se desgarran
las fibras latentes de mi vida.

En el eterno néctar de icontables dioses
has venido a mí para secar la herida
salvadora de muertes colosales
camino de flores marchitas.

En tus ojos viviré eternamente,
como grietas curtidas en la roca
con la luz de tu sonrisa vehemente
como la lejana luz de una alcoba.